Actualmente nos encontramos en una de las revoluciones más importantes en la historia de la humanidad, la revolución digital. Para afrontar esta revolución es imprescindible la adopción de nuevas tecnologías, y esta hoy día supone un reto para el sector primario. Esta transición al nuevo mundo digital puede dejar a gente atrás, ya que el entorno cambiante en el que vivimos no permite la inmovilidad, solo la adaptación al cambio y la proactividad.